La piedra aguamarina es la piedra principal del mes de marzo. Su precioso color verde-azulado nos recuerda al mar, de ahí su nombre. Los marinos la llevaban como protección contra el ahogamiento.
Como todas las piedras verdes, se asocia al 5º chakra, el de la garganta, por tanto, nos ayuda a mejorar la comunicación y la expresión.
Aparte, es una piedra que nos aporta calma, claridad mental y aumenta nuestra autoestima.
Conectada con el elemento agua, limpia y cura el alma, trayendo tranquilidad y equilibrando las emociones.
En la Antigua Grecia y Roma era muy utilizada como talismán y como elemento curativo para sanar enfermedades del hígado, estómago o de la vista.
Existen ciertas piezas y joyas que contienen aguamarina y que han pasado a la fama a lo largo de la historia, como es el aguamarina de Dom Pedro. Esta pieza es la talla de aguamarina más grande del mundo, pudiéndola encontrar en el Museo Nacional de Washington. Mide unos 60cm de altura y pesa 2kg. Formaba parte de una pieza mayor, encontrada en los años 80, la cual sufrió una caída, rompiéndose en tres pedazos, siendo este el mayor de ellos.
En el Antiguo Egipto también se utilizaba para crear joyas tan espectaculares como este collar:
En definitiva, la piedra aguamarina ha sido muy valorada desde hace siglos, tanto por sus propiedades como por su belleza. ¿La tienes en tu colección? ¿Tienes alguna joya con ella? ¡Te leemos!