La plata de ley 925 tiende a oscurecerse o amarillearse por un proceso llamado sulfuración, provocado por el azufre encontrado en el aire (sulfuro o ácido sulfhídrico). También puede oscurecerse por otros motivos, como es el pH de nuestra piel o los perfumes y geles que utilizamos.
Cuando se ha oscurecido mucho, los limpiadores de plata convencionales no suelen funcionar para devolverle su color original y su brillo, pero os enseñamos un truco casero que funciona a la perfección. Os explicamos:
- En un cuenco, coloca papel de aluminio con la parte mate mirando hacia arriba.
- Añade un vaso de agua caliente (no hirviendo) y dos cucharadas de bicarbonato sódico.
- Remueve hasta que el bicarbonato se haya disuelto.
- Añade todas tus joyas y déjalas dentro durante 20-25min.
- Si ves que alguna zona sigue oscura, frota suavemente con un cepillo de cerdas suaves.
- Pasado el tiempo, enjuágalas en agua fría y seca con un paño.
¡Listo! Tus joyas lucirán como nuevas.
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